domingo, noviembre 19, 2006

El sol calienta y cega

Todo el mundo quiere olvidar
para qué sanar?
si todo vuelve siempre al mismo puto lugar.
Son brutos, son brutos los que recuerdan el pan.
Son incapaces los que se creen sabios
y son asesinos los presidentes.
Todos se creen mejores y no saben que lo mejor está dentro de mí.
Todos se creen absolutos y la única cosa absoluta es la naturaleza que es inmóvil y que se mueve desesperadamente.
Fumar... porque no sé si este sea el aguante, pero sé que no hay nada en mi corazón. Que no toquen, que no quiero que me toquen... no me manoseen mis vistas ni mis visiones. Tócame... tócame como tocaron a Jim... pero tócame a mí. Tú también... tócame. Touch me.
Que no puedo llegar... que no quiero llegar porque no importa a dónde voy.
Y ya me voy.. y canto y me largo. Ya no sabrán de mí porque me voy perdiendo hasta encontrarme, y sé que nunca me voy a encontrar.
Hezkrivan... hezkrivan mucho que es fumdamental zer huna himbensión, y zer cemental como hun pez que uele y no hakarisia la nievla de hun cegundo.
Vuelen que yo volaré y no dejaré de escribir hasta que muera. Yo no te escucho nene, porque te tengo acá... acariciando palabras de paz que me revolucionan... es la única alternativa noviolenta que cambia mis olfatos de sed y de hambre.
Llegaré hasta mi tacto y pasaré con mi boca por tus labios para desembarcar mis manos en tu vientre que no es de pan y sí es de cal. Allí estás bella Mariel que no descansas por el mar y que con Valentía llamas a la prima de Charly, a Cassandra Lange para cantar una canción a Amanda que amando toca e Cielo y se acuerda de María, a quien repito que amaría Alejá-ndome de Paula y de Diana, que son artimañas peligrosas y tienen interés de matar a Lucía que se escapa doblando por los paisajes imaginados por Gabriela y por Ana María para pasar por la casa de Sofía y arrancarle los cachetes de rush y embutirle amor a Siu para ver si se saca toda esa nutella y se inyecta un poco de vida para no seguir con esta absurda inclemencia de morir lentamente como Matilda, que huele un poco de coca y se embriaga con vino para morir de diabetes crónica diciéndole a Margarita que no se le olvide decirle al pelirrojo toda la verdad pues es posible que Alejandría se ponga muy brava porque a Cato le hicieron el amor tan sólo con palabras y pues todos saben que Natalia está llena de oscuridad aunque se vea tan clara, porque a Silvia no le importa saber si alguien le importa saber cómo está porque Soledad le dijo un día que se acostara con María Mónica llevando a la mujer sin nombre en la boca y quitándole ese ojo de pez para que Juliana no la pesque con su macabra red de inalámbricos tornillos, los mismo que usó Fabi para engañar a María Gabriela el día que Pita apagó la luz para decirle a Maryluz que se tomara un vino en casa de Juana, que llena de incertidumbre le pregunta a Sonia cómo cree que se puede fumar sin contemplar.
Así, después de todo, el poeta Garbi le señala a su colega pelirrojo que no importa cuán lejos esté Alexis pero que está con su alma llena de mierda, y eso es lo importante para hacer vivir a otros en medio de un soliloquio de Sebastián, que le dice a Juancho que Toño no sabe para dónde va y que seguramente nunca terminará siendo Cánfora y que es un miserable Capitán con mil genes adentro diciéndole que se largue y le deje vivir la vida tranquila a Cánforalekos, porque Angélica nunca volverá a mirar los ojos de un sonriente mensaje de texto que habla y luego se calla atónito frente a la mirada lujuriosa de un argentino que quiere dar respuestas coherentes al absurdo intento de seguir viviendo, sumando uno con uno y dando resultados de a tres.
Así, necesito un gol para celebrar... porque la magia Mariel, no es suficiente. Ni el flaco García Lange, ni el flaco Luisito, ni el gordo Rodolfo ni el gordo Andrés, ni el loco Enrique, ni el loco Jim, ni el muerto John ni el vivo Paul pueden dar respuesta al funeral que cantó Rodríguez al lado de don Julio, que en el infierno le dará la bienvenida con un coctel pornográfico al lado de Marilyn, Jimi, Freddy, Janis, Anne, María y Mara.
Ya sabemos dónde están las cosas viejas-
Quiero mirar en mis ojos estrellas más grandes que el sol, pero sólo me estrello contra el suelo por andar mirando el sol... cegándome.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

SI LOS AMAS, DEJALAS IR... SI VUELVEN DALES 8 PUÑALADAS EN LA CABEZA. SI AUN ASI VUELVEN, CORRE, SOLO CORRE...

UN ABRAZO

Anónimo dijo...

Lejos de todo vuelve una calma que desgarra junto a usted y los fantasmas que reviven y los vivos que se van.
Buenas noches y mucho gusto de nuevo.